La pérdida del alma.
Todo estaba listo para la batalla, realmente esperaba que aquello no pasara tenía un mal presentimiento. No me gustaba la violencia para nada, no quería pasar por esto, odiaba la violencia desde que era niño, no quería ver como mis amigos perdían la vida por un mal entendido que involucraba a mi familia…. Mi familia, no quería pensar en que a ellos les podría pasar algo, estábamos tan bien a pesar de los problemas y todo lo que el nacimiento de Reneesme implicaba, estábamos bien. Éramos una familia y estábamos más unidos que nunca con un excelente futuro.
Mire a un costado al sentir su presencia y tome su mano si decir nada, solo entrelace mi mano con la suya sintiendo el anillo de bodas chocar con mi piel. Con ella no necesitaba demasiadas palabras, los gestos valían mucho más que las palabras.
Sentí como ella apretó aun más mi mano y la mire con una pequeña sonrisa, una sonrisa que solo podía dedicarle a ella, a mi Esme, ella sabia como me sentía porque ella me lo intentaba ocultar pero también podía sentir su miedo. Temía por nuestros hijos, por la pequeña y por los lobos, ella era todo corazón siempre preocupándose por todos. Me incline y le di un beso en la frente antes de escuchar que me llamaban.
Gire mi cabeza para ver de quien se trataba y luego mire a mi esposa con otra sonrisa.
-Te amo – le dije antes de soltar su mano para ir atender mi mundo.
Parecía que la paz volvía pero tan solo fue un espejismos de lo que estaba pasando, estábamos logrando que los Vulturi quedaran mal parados ante todos, ante su mundo y su gente, sabía que aquello era un golpe muy bajo para Aro, para él y para sus hermanos, pero esto ya lo estaba tomando personal, como Caius, él lo estaba tomando como algo personal. Destilaba odio hacia los lobos más que para nosotros.
Pero una seña hizo que todo cayera en la oscuridad, una sola seña de Aro y el espejismo se había roto como un espejo dejando ver la realidad tras la luz.
Mire fijamente al líder del clan italiano esperando que el tiempo se detuviera que solo pudiéramos charlar los dos solos y pudiéramos así razonar pero no, nada iba a detener todo esto, el caos de un de repente se apodero de toda el aérea de la pelea y ahora veía lo que se me venía en sima, lo estaba viendo pero mis pies no quería ir a ningún lado. Mire hacia un lado siguiendo el grupo que se había separado y luego mire a mi otro costado viendo como el resto del grupo iba por otro lado, negué con la cabeza ya que algo conocía muy bien el accionar de los Vulturi. Estábamos atrapados y éramos demasiados para el don de Bella..
Escuche como le gritaban a Jacob para que se llevara a Nessie, en aquel momento me desconcentre y deje de mirarlo a él para ver como el lobo salía corriendo para perderse en el bosque y así seguir al pie de la letra el plan. Pero cuando regrese la vista al frente me quede de hielo, un segundo que había perdido me estaba costado la vida, todo se había detenido ante mis ojos, ya no escuchaba nada, solo podía ver al frente, podía ver el cuerpo de Félix al frente del mío a pocos metros de mi cuerpo mirándome fijamente, me miraba como si algo no hubiese salido en sus planes, lo mire e intente ver a Aro, algo había dicho pero no podía oír algo me decía que mirara hacia abajo y aquello fue lo que hice, baje la vista al suelo para verla , el aroma fuerte de las cenizas me empezaban a destruir el corazón.
Quería moverme, quería saber cómo estaba pero no podía moverme escuchaba gritos, alguien gritaba que no nos atacaran a nosotros, creo que era la voz de Alice pero no podía escuchar. Todo me parecía tan lejos, tan de otro mundo. Solo podía verla a ella.
Mis manos subieron con desesperación hasta mi pelo rubio empezaba a sentir más rabia, cólera, ira. Mis rodillas flaquearon y cayeron al suelo, sentí los ojos rojos quería llorar pero no podía, gire la cabeza para ver como Edward se desesperaba por algo pero no pude ver el porqué solo sabía que de por ahí venia el olor a quemado, mire al frente de nuevo y no sé cómo me pare y empecé a correr contra aquel quien me arrebato la vida de mi esposa.
…
Algo me tomo en el aire y la figura de Félix se alejo de mi persona, quería zafarme de los brazos de aquellos que me tenían.
Quise luchar contra aquellos que decían ser mis amigos, aquellos que me arrebatan la posibilidad de cumplir lo que tanto quería que era morirme en aquel lugar junto a ella. Pero no pude eran demasiado para mí.
Llegamos a la casa y me solté, me miraron pero yo solo miraba al frente, mi vista solo se encontraba en el frente allí donde se daba la batalla, allí donde la había perdido. Allí donde había perdido mi alma.
Quizas suba otros capitulos de este mini diario pero si te gusta rolear y quieres ver como sigue la historia entra aqui y unente a un rol de crepusculo en donde todo puede pasar
-> http://generationafterbd.foroactivo.com/forum
0 comentarios: